La Guardia Civil ha detenido a un hombre de 74 años tras circular 20 kilómetros en sentido contrario por la autopista AP-7 a su paso por Cartagena (Murcia), poniendo en grave riesgo la seguridad de otros conductores. El suceso, según informa Europa Press, ocurrido en la madrugada del 20 de mayo de 2025, es el segundo incidente de este tipo protagonizado por el mismo individuo en solo tres días, tras ser interceptado previamente en Valencia por conducta similar.

Una intervención urgente para evitar una tragedia

El operativo comenzó cuando la Central de Tráfico (COTA) recibió múltiples llamadas alertando de un vehículo circulando en dirección contraria en la AP-7, sentido Alicante. Agentes del Destacamento de Tráfico de Cartagena movilizaron patrullas y establecieron un dispositivo para interceptar al conductor de forma segura. A la altura del kilómetro 799, los guardias civiles avistaron las luces del turismo infractor y procedieron a retener el tráfico para minimizar riesgos. Tras detenerlo en el arcén, el hombre se negó a someterse a las pruebas de alcoholemia, lo que añadió cargos adicionales a su imputación.

La investigación posterior reveló que el detenido ya había sido arrestado tres días antes en la provincia de Valencia por circular en sentido contrario en otra autopista, un antecedente que evidencia un patrón de conducta temeraria recurrente.

Contexto: reincidencia y riesgos en la AP-7

La AP-7, autopista que recorre la costa mediterránea española, es una vía de alto tránsito con tramos especialmente sensibles cerca de Cartagena, donde la combinación de curvas y tráfico pesado incrementa el peligro de accidentes. Este incidente se suma a otros ocurridos en la misma zona, como el de un conductor que circuló a 218 km/h en 2024.

Expertos en seguridad vial señalan que la reincidencia en delitos de tráfico es un problema creciente. Según datos de la DGT, el 55% de los conductores detenidos por conducción temeraria en 2024 ya tenían antecedentes similares. La negativa a realizar pruebas de alcoholemia, como en este caso, complica las investigaciones y refleja un desafío adicional para las autoridades.

Consecuencias legales y medidas preventivas

El detenido enfrenta cargos por dos delitos contra la seguridad vial: conducción temeraria y negativa a las pruebas de alcoholemia. La Fiscalía de Murcia podría solicitar prisión preventiva dado su historial reciente. Además, la Guardia Civil ha reforzado los controles en la AP-7, especialmente en horarios nocturnos, e insta a los ciudadanos a reportar comportamientos sospechosos al 062 o 112.

Este caso reabre el debate sobre la necesidad de medidas más estrictas para reincidentes, como la retirada definitiva del carné o la obligatoriedad de evaluaciones psicológicas. Mientras, la detención evidencia la importancia de la colaboración ciudadana y la rapidez en la actuación policial para prevenir tragedias.